"Zhuan Falun" - читать интересную книгу автора (Hongzhi Li)

Lección Segunda

Sobre el asunto del tianmu

Muchos maestros de qigong también hacen referencia a algunos aspectos del tianmu, pero el Fa tiene diferentes manifestaciones en diferentes niveles, y uno sólo puede ver las manifestaciones del nivel al que está cultivado. Él no puede ver la verdad más allá de su nivel, ni tampoco lo cree y debido a ello, cree que únicamente es correcto aquello que él ve en su propio nivel. Antes que su cultivación alcance niveles más altos, pensará que esas cosas no existen ni son creíbles y por eso, su mente tampoco puede ascender; esto está determinado por su nivel. Es decir, sobre el asunto del tianmu, algunos lo explican de esta manera y otros de aquella. Como resultado, se hace un enredo y al final, ninguno puede explicarlo. En realidad, el tianmu tampoco puede explicarse acabadamente en un nivel bajo. En el pasado, la estructura del tianmu pertenecía al mayor de los secretos, y la gente común tenía vedado acceder a dicho conocimiento. Por eso, a lo largo de la historia nadie lo menciona. Aquí tampoco nos explayamos basándonos alrededor de las exposiciones del pasado. Para explicarlo, empleamos la ciencia moderna y el lenguaje moderno más simple, exponiendo sus cuestiones fundamentales.

El tianmu del que hablamos, en realidad, se encuentra justamente en un lugar ubicado un poco más arriba del punto existente entre las cejas, conectado con el cuerpo pineal; esta conexión es el canal principal. El cuerpo humano tiene incluso incontables ojos. La Escuela Dao dice que cada qiao es un ojo. La Escuela Dao llama “qiao” a los puntos en el cuerpo que en la medicina tradicional china se denominan “puntos de acupuntura”. La Escuela Fo sostiene que cada poro es un ojo. Por eso, hay algunas personas que pueden leer con las orejas, con las manos o con la parte posterior de la cabeza. Además, hay algunos que pueden ver con los pies o el vientre. Todo esto es posible.

Hablando sobre el tianmu, primero diremos algo sobre nuestros ojos físicos. Hoy en día, hay personas que creen que los ojos físicos pueden ver cualquier materia u objeto en este mundo nuestro. Por eso, a ciertas personas se les produce una idea terca y consideran que sólo son verdaderas y reales las cosas que ven con los ojos y no creen aquello que no pueden ver. En el pasado, siempre se consideró que tal clase de gente tenía una cualidad de iluminación pobre, no obstante, nadie podía explicar la razón. Decir que uno no cree en aquello que no puede ver suena razonable. Pero desde la perspectiva de un nivel un poco más alto, deja de serlo. Cada espacio-tiempo está compuesto por materia. Por supuesto que diferentes espacios-tiempo tienen composiciones diferentes de materia, y las formas en que se manifiestan las distintas vidas físicas son diferentes.

Voy a citarles un ejemplo. La religión budista sostiene que todos los fenómenos de la sociedad humana son ilusorios e irreales. ¿Cómo pueden ser ilusorios? Los objetos que están allí son tangibles y reales; ¿quién puede decir que sean falsos? La forma existente de un objeto es diferente de sus manifestaciones, pero nuestros ojos tienen la capacidad de estabilizar un objeto en nuestra dimensión física en el estado en que lo vemos ahora. Los objetos no están realmente en este estado, y ni siquiera están así en nuestra dimensión. Por ejemplo, ¿cómo luce el cuerpo humano a través de un microscopio? Todo el cuerpo está disgregado, compuesto por pequeñas moléculas que parecen granos de arena en movimiento. Los electrones giran alrededor del núcleo atómico y el cuerpo entero está moviéndose. La superficie del cuerpo no es lisa ni regular. En el universo, todos los objetos -acero, hierro o piedra- son iguales y dentro de ellos, sus elementos moleculares están moviéndose. Tú no puedes ver su conformación entera, y en realidad todo es inestable. Esta mesa también está moviéndose, pero nuestros ojos no pueden ver la verdad. Este par de ojos puede producir al hombre una impresión errónea.

No es que no podamos ver las cosas en el nivel microscópico. No es que el ser humano no tenga esta capacidad. En realidad, por naturaleza está dotado de tal capacidad, y es capaz de ver las cosas en ciertos niveles del microcosmos. Justamente debido a que los humanos tenemos este par de ojos de esta dimensión física, ellos nos crean una especie de falsa impresión, y nos limita la visión. Por eso, en el pasado se decía que aquello que la gente no ve, no lo reconoce. En el mundo de la cultivación siempre se ha considerado que tal tipo de persona tiene una pobre cualidad de entendimiento y está perdida entre la gente común, engañada por las impresiones falsas. Esto es lo que siempre han dicho las religiones. Por cierto, nosotros también lo encontramos razonable.

Este par de ojos puede estabilizar las cosas en un determinado estado dentro de nuestra dimensión física. A excepción de esto, no tiene ninguna otra capacidad significativa. Cuando uno mira algo, la imagen del objeto no se forma directamente en los ojos. Los ojos son semejantes al lente de una cámara fotográfica, la cual sólo sirve como instrumento. Para tomar una foto a distancia, el foco de la cámara se extiende. Nuestros ojos también tienen tal función. Cuando uno mira en la oscuridad, las pupilas se dilatan. Cuando una cámara toma una foto en la oscuridad, el diafragma también se agranda pues, de otra manera, con insuficiente entrada de luz, la foto entera sale oscura. Cuando uno sale al exterior, donde hay mucha luz, las pupilas se contraen rápidamente, pues de otro modo te encandilas y no puedes ver nada claramente. Una cámara funciona con el mismo principio y la abertura también necesita contraerse. Ésta sólo puede capturar la imagen de un objeto y no es más que un instrumento. Cuando realmente miramos cierta cosa, sea una persona o la forma existente de un objeto, las imágenes se forman en el cerebro. Es decir que vemos a través de los ojos y lo visto es entonces transportado por medio del nervio óptico al cuerpo pineal, localizado en la mitad posterior del cerebro, reflejándose la imagen en dicha zona. Esto significa que es en esta parte del cuerpo pineal del cerebro donde realmente se reflejan las imágenes y donde uno ve los objetos. Incluso la ciencia médica moderna ya lo ha reconocido.

La abertura del tianmu a la que nos referimos, implica abrir un pasaje entre las cejas, para esquivar el nervio óptico, de modo que el cuerpo pineal pueda ver directamente afuera. Llamamos a esto la abertura del tianmu. Algunas personas piensan: “Esto tampoco es realista; de todos modos, este par de ojos todavía puede servir de instrumento y captar la imagen de un objeto; no es posible ver sin estos ojos”. La disección médica moderna ya ha descubierto que la mitad delantera del cuerpo pineal está equipada con la estructura entera de un ojo. Como crece dentro del cráneo, lo consideran un ojo atrofiado. Nosotros, en los círculos de cultivación, tenemos reservas acerca de que éste sea un ojo atrofiado. No obstante, después de todo, la medicina moderna ya reconoce que existe un ojo en el centro del cerebro humano. El pasaje que abrimos se dirige justamente a ese punto, de modo que concuerda con el conocimiento de la medicina moderna. A diferencia de los ojos físicos, este ojo no crea ilusiones, ya que puede ver la naturaleza original de las cosas y de la materia. Por eso, una persona con su tianmu en un nivel alto puede ver más allá de nuestra dimensión, en otros espacios-tiempo, y puede contemplar escenas que una persona común no puede ver. Una persona con su tianmu en un nivel no muy alto puede tener una visión penetrativa y ver objetos a través de una pared o en el interior de un cuerpo humano. El tianmu posee precisamente este tipo de capacidad de gong.

La Escuela Fo habla sobre las cinco visiones del tianmu: la visión del ojo carnal, la del ojo celestial, la del ojo sabiduría, la del ojo Fa y la visión del ojo fo. Estos son los cinco grandes niveles del tianmu. Cada nivel se subdivide aún en alto, medio y bajo. La Escuela Dao habla sobre nueve por nueve, u ochenta y un niveles de ojos de Fa. Acá abrimos el tianmu para todos ustedes, pero no a los niveles por debajo de la visión del ojo celestial. ¿Por qué? Porque aunque estés aquí sentado y hayas empezado a cultivarte, al fin y al cabo recién estás empezando desde el nivel de la gente común y no has dejado muchos corazones de apego del ser humano común. Al abrir tu tianmu por debajo del plano de la visión del ojo celestial, posees algo que la gente común considera una capacidad de gong y puedes ver las cosas a través de una pared o el interior de un cuerpo humano. Si transmitiésemos una capacidad de gong así a tan gran escala y abriésemos el tianmu de cada persona a este grado, la sociedad de la gente común sería seriamente afectada, y su estado normal sería desbaratado. No se podría guardar los secretos de estado; daría lo mismo si la gente estuviese vestida o no y podrías ver a una persona en su habitación desde afuera. Al pasar por un puesto de lotería, probablemente escogerías el boleto del primer premio. ¡Así no va! Piensen, si así fuera el caso, con el tianmu de todos abierto a la visión del ojo celestial: ¿sería ésta una sociedad humana? No se permite en absoluto la existencia de cualquier hecho que perturbe seriamente a la sociedad humana. Si realmente yo abriera tu tianmu a tal nivel, probablemente te convertirías al instante en un maestro de qigong. En el pasado, algunas personas ya anhelaban ser maestros de qigong; por lo tanto, ahora con el tianmu abierto ya pueden justamente comenzar a tratar a pacientes. Haciéndolo así, ¿no estaría yo conduciéndote hacia una vía perversa?

Entonces, ¿a qué nivel abro tu tianmu? Lo abro directamente al nivel de la visión del ojo sabiduría. Para hacerlo a un nivel más alto, tu xinxing no es lo suficientemente alto; abrirlo a un nivel más bajo desbarataría seriamente el estado normal de la sociedad. Al abrirlo al nivel de la visión del ojo sabiduría, no tienes la capacidad de ver a través de una pared ni en el interior de un cuerpo humano, pero sí puedes ver las escenas existentes en otras dimensiones. ¿Qué ventaja tiene esto? Esto puede fortalecer la confianza en tu práctica de gong, porque cuando veas con exactitud y claridad algo que la gente común no puede ver, te convencerás de que esto realmente existe. Sin importar que ahora veas o no claramente, tu tianmu es abierto a este nivel, y resultará provechoso para tu práctica de gong. Un cultivador verdadero de Dafa, que se exige estrictamente a sí mismo en la elevación de su xinxing, logrará idéntico efecto leyendo este libro.

¿Qué determina el nivel del tianmu de una persona? No es que ya veas todo después de abrirse tu tianmu, no es así. Hay todavía una clasificación por niveles. Entonces, ¿qué determina los niveles? Hay tres factores. El primero de ellos es que el tianmu de cada uno debe tener un campo que va del interior al exterior, al cual llamamos esencia de qi. ¿Cuál es su función? Es como la pantalla de un televisor: sin tener el material fosforescente es meramente una bombilla que sólo emite luz pero que no muestra imágenes al encenderlo. Es justamente el material fosforescente el que hace posible que las imágenes aparezcan en la pantalla. Por supuesto, este ejemplo no es tan adecuado ya que nosotros vemos las imágenes directamente, mientras que el televisor las muestra a través de la pantalla fosforescente; más o menos esa es la idea. Esta pizca de esencia de qi es extremadamente preciada. Está compuesta por algo más fino y esencial, que se refina del de. Normalmente, la esencia de qi de cada persona es diferente. Entre diez mil personas, tal vez se encuentren dos a un mismo nivel.

Los niveles del tianmu son manifestaciones directas del Fa en nuestro universo. Es algo sobrenatural y está estrechamente relacionado con el xinxing de cada uno. Si el xinxing de una persona es bajo, su nivel también es bajo. Como su xinxing es bajo, esta persona pierde mucho de su esencia de qi. Si uno posee un xinxing muy alto, y desde su infancia hasta la adultez en la sociedad humana común, ha tomado ligeramente la fama, las riquezas, los conflictos entre la gente, beneficios y ganancias personales, y “las siete emociones y los seis deseos”, es posible que su esencia de qi se encuentre bien preservada. Por eso, después de abrirse su tianmu, ve con más claridad. Un niño menor de seis años puede ver muy claramente cuando su tianmu es abierto. Es muy fácil abrir su tianmu; con una frase basta.

Debido a la contaminación de la poderosa corriente y a la gigantesca tina de tintura de la sociedad humana común, muchas de las cosas que la gente considera correctas son en realidad incorrectas. ¿Quién no desea una vida cómoda? Para vivir cómodamente, es probable que se dañen los intereses ajenos, se estimulen los deseos egoístas, se saque beneficio a costa de otros, o se llegue a dañar y humillar a los demás. Para ganar beneficios personales, algunos compiten y pelean entre la gente común. ¿No va esto en contra de la naturaleza del universo? Por eso, aquello que la gente considera bueno no es necesariamente bueno. Frecuentemente, cuando se educa a un niño pequeño deseando que éste alcance cierta posición en la sociedad de la gente común, los adultos le enseñan así: «Debes aprender a ser un niño astuto». Desde la perspectiva de nuestro universo, la astucia en sí misma ya es incorrecta, puesto que hablamos de seguir el curso natural y tomar los intereses personales con ligereza. Ser muy astuto es justamente para obtener beneficios personales a costa de otros. «Si alguien te ofende, avísale a su maestro y cuéntaselo a sus padres»; «cuando veas dinero en el suelo, debes recogerlo». El niño es educado de esta manera. Desde pequeño y hasta hacerse mayor, mientras crece, recibe más y más enseñanzas de ese estilo y gradualmente se vuelve más y más egoísta en la sociedad humana común, obteniendo ventajas injustas y perdiendo así su de.

Esta materia de no desaparece después que uno la pierde sino que es transferida a otra persona. Sin embargo, la esencia de qi sí se disipa. Si uno es astuto y sagaz de niño hasta adulto, mantiene un fuerte deseo por sus intereses personales y sólo piensa en buscar ganancias, generalmente no ve con mucha claridad después que su tianmu se abre. No obstante, esto no quiere decir que nunca tendrá una visión clara. ¿Por qué? Porque el curso de la cultivación es justamente para regresar a nuestro ser original y verdadero, y practicando gong constantemente se logrará compensar y recuperar continuamente la esencia de qi perdida. Por eso damos importancia al xinxing, a la elevación y ascensión en forma integral de todo el ser. Cuando el xinxing se eleva, todos los otros aspectos se elevan con él. Si el xinxing no se eleva, la esencia de qi alrededor del tianmu tampoco se recupera. Esta es precisamente la razón.

El segundo factor consiste en que si se tiene una buena cualidad innata, el tianmu puede también abrirse a través de la práctica de gong. Frecuentemente alguno se asusta en el momento en que su tianmu se abre. ¿Por qué se asusta? Porque generalmente se elige la medianoche para practicar gong, cuando está oscuro y tranquilo. Mientras uno practica, de repente ve un gran ojo justamente frente a sí; le da un susto que lo deja tan aterrado que después de eso ya no se atreve a practicar gong. ¡Qué espantoso es eso! Un ojo tan grande mirándolo y parpadeando, tan real y vivaz. Consecuentemente, algunos lo llaman ojo del demonio, mientras que otros le dicen ojo de fo y así. En realidad, es tu propio ojo. Por supuesto, la cultivación depende de uno mismo, mientras que el gong depende del shifu. El proceso entero de la transformación del gong para un cultivador es muy complejo en otras dimensiones. No sólo en otras dimensiones, sino que en todas y cada una de las dimensiones los cuerpos son transformados. ¿Puedes hacerlo tú mismo? No, no puedes hacerlo. Todo esto es arreglado por tu shifu y es el shifu quien lo hace. Por eso se dice que la cultivación depende de tu propio esfuerzo, mientras que el gong depende de tu shifu. Tú sólo tienes tal deseo y tal pensamiento, pero es el shifu quien realmente lo hace.

Algunas personas consiguen abrir el tianmu por medio de su propia práctica. Decimos que ése es tu propio ojo, pero no eres capaz de desarrollarlo por tu cuenta. Algunas personas tienen shifu. Cuando el shifu nota que tu tianmu está abierto, transforma un ojo para ti. Ese ojo es llamado el ojo verdadero. Naturalmente, algunas personas no tienen shifu, pero tienen uno de paso. La Escuela Fo dice que los fo son omnipresentes. Los fo son tan numerosos que puedes encontrarlos en todas partes. Otros dicen: «Hay seres espirituales tres pies por encima de la cabeza», es decir, que son simplemente incontables. Si un shifu que anda de paso descubre que has practicado muy bien con tu tianmu abierto y que necesitas un ojo, él transformará uno para ti, lo cual también puede considerarse un fruto de tu propia cultivación. Porque salvar a la gente no se hace con ninguna condición o consideración de recompensa, remuneración o fama. Ellos son mucho más grandiosos que los héroes entre la gente común y actúan así exclusivamente debido a sus corazones de bondad y compasión.

Después de la abertura de tu tianmu, aparece esta situación: la luz te deslumbra y sientes irritación en tus ojos. En realidad, no se irritan tus ojos, sino tu cuerpo pineal. Sientes la luz que te irrita los ojos porque todavía no tienes este otro ojo. Al ser provisto de este ojo, la luz ya no te irrita más. Algunos de ustedes pueden sentir o ver este ojo. Dado que éste tiene la misma naturaleza del universo, es muy inocente y también curioso, y mira también hacia dentro tuyo para ver si tu tianmu está abierto o no, y si ya puedes ver: él mira hacia tu interior. En ese momento tu tianmu se abre y te da un susto cuando, de repente, lo ves observándote. De hecho, ése es tu ojo. De ahora en adelante, cuando mires las cosas, verás a través de este ojo. Aunque tu tianmu esté abierto, sin este ojo no puedes ver absolutamente nada.

El tercer factor consiste en que cuando atraviesas niveles, se revela la diferencia de dimensión a dimensión. Ésta es la cuestión que verdaderamente determina el nivel que uno alcanza en la cultivación. Uno ve las cosas no sólo a través del canal principal, sino también mediante muchos subcanales. La Escuela Fo considera que cada poro del cuerpo humano es un ojo, mientras que la Escuela Dao dice que cada abertura del cuerpo humano es un ojo. Así que cada punto de acupuntura es un ojo. Por supuesto, ellos exponen sólo una forma de las transformaciones del Fa en el cuerpo, y uno puede ver cosas desde cualquier parte de éste.

El nivel logrado al cual nos referimos es diferente de esto. Además del canal principal, hay varios subcanales principales arriba de las cejas, en la parte superior e inferior del párpado, y en el punto shangen; éstos determinan la cuestión de los niveles que uno atraviesa. Por supuesto, si un cultivador común puede ver a través de estos diversos lugares, el nivel sobrepasado ya es muy alto. Algunas personas pueden ver también con sus ojos físicos, pues han perfeccionado sus ojos en la cultivación, y éstos también poseen varias formas de capacidades de gong. Pero si uno no maneja este ojo en forma apropiada, cuando mire un objeto en esta dimensión, no lo verá en otra dimensión. Esto tampoco va. Por eso, algunos suelen utilizar uno de los ojos para ver cosas en esta dimensión, y el otro para ver cosas en otra dimensión. Sin embargo, no hay subcanal debajo de este ojo (el derecho), pues existe una relación directa con el Fa. La gente tiende a usar el ojo derecho cuando hace cosas malas, así que no hay subcanales debajo del ojo derecho. Nos hemos referido a algunos de los subcanales principales que se manifiestan en la cultivación del Fa dentro del mundo.

Alcanzados niveles extremadamente altos y más allá de la cultivación del Fa dentro del mundo, aparece también una especie de ojo compuesto. En la parte superior de la cara se forma un ojo grande con incontables ojos pequeños dentro del grande. Algunos seres iluminados muy elevados han cultivado tantos ojos, que éstos les cubren todo el rostro. Todos los ojos ven a través de este ojo grande, el cual puede ver cualquier cosa que se desee y es capaz de ver en todos los niveles con una sola mirada. Hoy en día, los zoólogos y entomólogos estudian a las moscas. Los ojos de las moscas son muy grandes y los llaman ojos compuestos, porque a través del microscopio se puede observar que en estos ojos hay incontables ojos pequeños. Tal estado puede manifestarse al alcanzar un nivel extremadamente alto, mucho, pero mucho más elevado que rulai. Sin embargo, una persona común no puede ver la existencia de dicho ojo, ni tampoco los practicantes en un nivel común. Ellos sólo pueden ver lo mismo que la gente común, pues dicho ojo se halla en otra dimensión. Aquí les he hablado acerca del asunto de atravesar niveles, es decir, de la capacidad de atravesar diferentes dimensiones.

Básicamente, he revelado a todos la estructura del tianmu. Abrimos tu tianmu con fuerza externa, pues resulta más rápido y comparativamente más fácil. Mientras hablo del tianmu, cada uno de ustedes siente que su frente está tensándose, como si los músculos se amontonaran allí, taladrando hacia dentro. ¿Es así? Sí, así es. Aquellos que vienen realmente para aprender Falun Dafa, dejando toda clase de corazones, experimentarán tal sensación y la fuerza será muy grande, empujando hacia el interior. Soltamos un gong especial para abrir tu tianmu. Al mismo tiempo, estoy soltando también Falun para reparar tu tianmu. Cuando hablamos del tianmu, los abrimos para todos los que practican Falun Dafa. Pero esto no quiere decir que todos puedan ver claramente, o que ya serán capaces de ver; esto tiene una relación directa contigo. Pero no importa si no ves, pues durante tu cultivación, siempre y cuando eleves tu nivel en forma constante, serás capaz de ver cosas gradualmente y tu visión nublada se volverá paso a paso más nítida. Siempre que te cultives y estés decidido a hacerlo, recobrarás todo aquello que hayas perdido.

Abrir el tianmu por tu cuenta es comparativamente más difícil. Ahora voy a hablar sobre algunas formas en que uno mismo puede abrir su tianmu. Por ejemplo, cuando sentado en meditación alguien observa su frente y el tianmu, encontrará que allí no hay nada excepto la oscuridad. Con el paso del tiempo, sentirá que su frente se vuelve gradualmente blanca. Después de un período de cultivación, advierte que el área de su frente se torna brillante y que más tarde se pone roja. En este momento, comienza a florecer como las flores que se ven en televisión o en el cine, cuyos capullos abren sus pétalos en un abrir y cerrar de ojos. Aparecen tales escenas. El color rojo es plano al comienzo y entonces súbitamente se hace protuberante en el centro y continúa floreciendo. Si desearas hacerlo florecer completamente hasta el final por tu propia cuenta, aun ocho o diez años no serían suficientes, porque el tianmu entero está tapado.

El tianmu de algunas personas no está tapado y tiene un canal. Pero si uno no practica gong, éste carece de energía. Por eso, cuando se practica gong, aparece súbitamente una masa redonda de materia negra ante sus ojos. Después de un largo tiempo de práctica, esa cosa negra se vuelve gradualmente blanca y después más y más brillante, hasta que el practicante siente que los ojos lo encandilan. Así sucede que alguna persona dice: «Veo el Sol», o «Veo la Luna». En realidad, no has visto ni el Sol ni la Luna. Entonces: ¿qué viste finalmente? Es precisamente este canal de tu tianmu. Algunas personas atraviesan los niveles comparativamente con mayor rapidez. Después que el ojo es plantado, ven cosas de inmediato. Pero otros encuentran mucha dificultad; tan pronto practican gong sienten como si corrieran hacia el exterior a lo largo de este canal que se parece a un túnel o un pozo. Aun mientras duermen, sienten que están corriendo hacia fuera. Algunos se sienten cabalgando, otros volando; algunos sienten que están corriendo y otros como si estuvieran conduciendo un automóvil y lanzándose hacia el final del canal. No obstante, sienten que nunca pueden llegar al final del canal, pues es muy difícil abrir el tianmu por cuenta propia. La Escuela Dao considera al cuerpo humano como un pequeño universo. Si éste es un pequeño universo, piensen todos: hay más de “ciento ocho mil li” desde la frente hasta el cuerpo pineal. Por eso, uno siente que está siempre lanzándose hacia fuera pero que nunca llega.

Es muy razonable que la Escuela Dao considere al cuerpo humano como un pequeño universo. Esto no quiere decir que su composición y su estructura sean iguales a las del universo, ni se refieren a la forma del cuerpo humano existente en nuestra dimensión física. Diciéndolo según el entendimiento de la ciencia moderna: ¿cuál es el estado del cuerpo físico en un nivel más microscópico que la célula? Hay diferentes composiciones moleculares, y debajo de las moléculas hay átomos, protones, núcleos atómicos, electrones y quarks. Las partículas más pequeñas estudiadas hoy en día son los neutrinos. Entonces, ¿cuál es la partícula más y más pequeña? Por cierto que es demasiado difícil investigarlo. En su último período, Sakya Muni dijo una frase así: «Es tan inmenso que no tiene exterior y tan diminuto que no tiene interior». ¿Qué significa esto? Al nivel de rulai, inmenso quiere decir que no es posible ver los confines del universo y diminuto, que no se puede ver la partícula más pequeña de materia. Por eso él dijo que es tan inmenso que no tiene exterior, y tan diminuto que no tiene interior.

Sakya Muni también hizo su exposición de los tres mil mundos. Afirmó que en la galaxia de la Vía Láctea de nuestro universo hay tres mil planetas donde existen seres vivientes con cuerpos como los seres humanos. Expresó que también hay tres mil mundos en un grano de arena. Un grano de arena es entonces justamente como un universo en el cual hay seres inteligentes como nosotros. También hay planetas, montañas y ríos. ¡Esto suena inconcebible! Si es verdad, sólo piensen en esto: ¿acaso no hay aun arena en esos tres mil mundos? Y en cada grano de arena ¿no hay aun tres mil mundos? Y entonces, esos tres mil mundos ¿no tienen también arena? ¿Y no hay aun tres mil mundos en cada grano de su arena? Por eso, al nivel de rulai, no es posible llegar a ver el final.

Lo mismo ocurre con las moléculas de las células humanas. La gente se pregunta cuán grande es el universo. Les digo a todos que este universo tiene sus confines. Sin embargo, incluso en un nivel como el rulai, todavía se considera que el universo no tiene bordes ni límites; es infinitamente grande. Pero el interior del cuerpo humano, desde las moléculas hasta las partículas microscópicas de niveles microcósmicos, es tan grande como este universo. Esto parece inconcebible. Al crearse un ser humano o una vida, la composición específica de su vida y naturaleza original ya está formada en un nivel extremadamente microcósmico. Por eso, nuestra ciencia contemporánea está muy atrasada en su estudio. En comparación con esas vidas en los planetas de alta sabiduría en todo el universo, el estándar de la ciencia y la tecnología de nuestra humanidad es bastante bajo. Somos aún incapaces de abrir y atravesar otras dimensiones que existen simultáneamente en el mismo lugar. Sin embargo, las naves espaciales de otros planetas viajan directamente en otras dimensiones donde el concepto de espacio-tiempo es diferente. Por lo tanto, vienen y se van en un instante, desplazándose tan rápidamente que el razonamiento humano no lo logra aceptar.

Al hablar sobre el tianmu, mencioné esta cuestión: mientras corres hacia fuera por el canal, sientes que éste es ilimitado e infinito. Algunas personas pueden ver otra escena: no se sienten corriendo a lo largo de un túnel, sino que se van desplazando hacia delante a lo largo de un amplio camino ilimitado e interminable, con montañas, ríos y ciudades hacia sus dos lados. Esto suena incluso más increíble. Recuerdo a un maestro de qigong que dijo algo así: en un solo poro del cuerpo humano hay una ciudad donde corren trenes y automóviles. Al escuchar esto, algunos se sorprenden mucho y lo encuentran increíble. Como todos saben, las partículas microscópicas de materia incluyen moléculas, átomos y protones. Finalmente, investigando aún más hacia abajo -si en cada nivel pudieras ver su plano en lugar de un punto, como el plano de las moléculas, el de los átomos, el de los protones, o el del núcleo- estarías ya observando las formas existentes de diferentes dimensiones. Cualquier objeto, incluyendo el cuerpo humano, coexiste y está comunicado con los demás niveles de las dimensiones cósmicas. Cuando la ciencia física contemporánea estudia las partículas microscópicas de materia, analiza solamente una partícula mediante los métodos de partición y fisión. Después de la fisión nuclear, estudia sus componentes catalizados. De haber un instrumento que captase la manifestación total de todos los átomos o moléculas existentes en ese nivel y si puedes ver tal escena, pues ya habrás atravesado esta dimensión y entonces verías la verdadera existencia de otras dimensiones. El cuerpo humano corresponde a dimensiones externas; tiene tal forma de existencia.

Otros estados diferentes pueden aparecer cuando uno trata de abrir el tianmu por su cuenta. Hemos hablado en primer lugar de fenómenos relativamente comunes. También hay gente que ve su tianmu girando. Practicantes daoístas frecuentemente ven algo girando en su tianmu, y cuando el disco taiji se quiebra con un chasquido, pueden ver imágenes. Sin embargo, eso no quiere decir que tengas taiji en tu cerebro. De hecho, fue tu shifu quien te plantó un sistema de cosas al comienzo, una de las cuales fue el taiji. Él sella tu tianmu, y cuando llega el tiempo de la abertura de tu tianmu, el disco taiji se quiebra y se abre. Es el shifu el que arregla todo esto específicamente para ti; no se trata de algo original de tu cerebro.

Existen personas que persiguen la abertura del tianmu. Pero cuanto más practican, tanta mayor dificultad encuentran para abrirlo. ¿Cuál es la razón? Ellas mismas no tienen idea. La razón principal es que no se puede perseguir el tianmu. Cuanto más lo persigues, tanto menos obtienes. Cuanto más lo persigues, no sólo no se abre sino que en su lugar, una cosa ni negra ni blanca se segrega desde el tianmu y lo va tapando. Si continúa así mucho tiempo, forma un campo muy grande. Cuanto más fluye, tanto más se acumula y menos se abre el tianmu; cuanto más lo persigues, tanto más emana y como resultado, esta cosa rodea todo el cuerpo. Tiene mucho grosor y lleva un campo muy grande. Incluso si el tianmu de tal persona está realmente abierto, tampoco podrá ver, ya que estará sellado por su propio corazón de apego. Sólo cuando en el futuro deje de pensar en el tianmu y abandone completamente este apego, el fluido desaparecerá gradualmente. Sin embargo, para quitárselo hay que pasar por un proceso muy largo y doloroso de cultivación. Esto es realmente innecesario. Algunas personas no lo saben; aunque el shifu les dice que no persigan el tianmu, que éste no debe perseguirse, tercamente ellos no le creen. No cesan en su intento de procurarlo, y al final, el resultado termina siendo justamente el contrario.