"La Rana Viajera" - читать интересную книгу автора (Camba_Julio)

--Es una racha. Hay que aprovecharla...

Llueven sobre el encarnado fichas, placas y billetes. Los postores de
grandes sumas las hacen asegurar. Naturalmente que este seguro no es
contra la pщrdida. No se ha llegado a·n a constituir una compaёэa que
asegure las rachas de un color contra el color contrario. Es ·nicamente
para el caso de que se dщ un _aprщs_ de treinta y una. Por un duro cada
cien duros o fracciєn de cien duros, el jugador garantiza su capital
contra lo que constituye el cero del treinta y cuarenta.

Se produce una gran emociєn. Al griterэo de hace un segundo sucede un
silencio imponente. Estamos como en el circo, cuando para la m·sica y se
avecina el ejercicio peligroso.

El empleado comienza a echar las cartas, y el encarnado saca dos.

--┐Otra vez dos?

--бMalo! бMalo...!

--Ahora quiebra la racha...

Y, en efecto, quiebra la racha. El negro gana. Las raquetas de los
empleados, miradas con ojos de perdidosos, parecen enormes...

--┐Ha visto usted con lo que se sale ahora la baraja?--exclama uno de
los que habэan puesto a encarnado--. Mire usted...

Y enseёa su cartєn. Estos cartones estсn divididos en columnas donde se
marcan con puntos los colores que ganan. En una columna se ponen los
puntos correspondientes al negro, y, en otra, los correspondientes al
encarnado. Luego se trazan las lэneas de punto a punto y se va
obteniendo un grсfico del juego, que es algo asэ como el grсfico de una
fiebre tifoidea. Hay juegos serpentinos, de lэnea inquieta, que salta
constantemente de columna a columna y que podrэan llamarse juegos de
alambique. Hay juegos casi rectos, en los que se dan 10, 15, 20 negros o
encarnados sucesivos. Hay juegos mixtos... Lo malo es que el grсfico del
juego no se conoce hasta el final. El jugador que ve salir cuatro negros
consecutivos deduce que el juego lleva una direcciєn recta, y haciendo,
a su vez, un juego recto, pone su dinero a negro. Naturalmente que, a lo
mejor, sale encarnado. Entonces el jugador dice que ha quebrado el juego
y considera que la baraja se ha hecho traiciєn a sэ misma. Yo me inclino
a creer que los jugadores se precipitan en sus juicios sobre las
barajas. ┐Que por quщ, si a la postre iba a resultar que se trataba de
una baraja de alternativa, ha comenzado el juego con cuatro encarnados?
бQuiщn sabe! A lo mejor la baraja lo hizo para despistar...

--Ha quebrado el juego. Mire usted mi cartєn...

En realidad, lo ·nico que ha quebrado es la lэnea.